Carnaval Habanero
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| Carnavales en La Habana |
La Historia del Carnaval
Los carnavales en Cuba son las fiestas más significativas que se realizan en el país y tienen su orígen de los colonos hispanos.
Los orígenes de esta festividad se remontan a la Sumería y el antiguo Egipto, que se realizaban en honor del toro Apis, hace más de 5000 años, con celebraciones muy parecidas en la época del Imperio Romano, eran fiestas paganas en honor a Baco, el dios romano del vino, el caos y las fiestas, las saturnales y las lupercales romanas (antigua fiesta romana al semidiós Luperco, protector de los rebaños). Luego la costumbre se expandió por Europa, siendo llevado a América por los navegantes españoles y portugueses a finales del siglo XV. El carnaval era un desfile en que los participantes vestían disfraces y usaban máscaras.
En Cuba las primeras manifestaciones fueron desde finales del siglo XVI con la introducción de las conmemoraciones católicas y los esclavos de diferentes regiones y etnias africanas.
El reglamento de Esclavos dictado en 1842 autorizó la diversión y recreación los días festivos después de cumplir con las prácticas religiosas. En esas fiestas la presencia de los Santos católicos entre las divinidades africanas dio lugar al sincretismo religioso. En 1823 se aprovó los cabildos día de reyes.
Los Miércoles de Ceniza y otras celebraciones religiosas que participaban los cabildos (asociación de esclavos o ex-esclavos de carácter religioso), dio lugar a las Carnestolendas que se celebraban en Cuba a finales del siglo XVI previo a las Cuaresmas. En esta festividad se utilizaban los mismos elementos profanos que acompañaban las fiestas del Corpus Cristi como comparsas y los muñecones, pero sobre todo, las comparsas de “mamarrachos”.
Después de 1860, los negros introdujeron la conga, lo que llevó a los cubanos a arrollar alegremente detrás de los instrumentos de precusión en época de carnaval. Ellos mezclaban comparsas de barrios, carros de tarrascas (serpiente monstruosa que se pasea en la procesión del Corpus), gigantes o muñecones y comparsas de mamarrachos generando una interinfluencia que devino el proceso de gestación de la Nacionalidad cubana.
Al inicio de la República en el siglo XX, el carnaval constituyó un elemento de la nacionalidad y nación cubana, pués con las congas se fomentó la integración entre los cubanos de todas las razas, modos y costumbres que pasaron a ser parte de la cubanía.
| Carnavales en el malecón |
Los Carnavales en La Habana
Por su belleza y calidad, los carnavales habaneros se consideraron entre los primeros del mundo, junto a los de Río de Janeiro, Nueva Orleans, Venecia y Niza. El Proyecto Identidad los declaró entre las tradiciones habaneras.
La festividad la dirigía la Comisión del Carnaval de La Habana, subordinada al Ayuntamiento, conjunto con la participación de los barrios y los aportes financieros de comerciantes e industriales, que generaban ingresos para la alcaldía.
El recorrido de las comparsas y carrozas comenzaban en el Malecón, hasta el Paseo del Prado y el Capitolio. Giraban en la Fuente de la India y regresaban por la misma vía.
Por las calles desfilaban automóviles descapotados, motocicletas y camiones abiertos, que se intercalabancon elementos tradicionales y las acrobacias de la unidad de ceremonias de la policía motorizada.
En los palcos y gradería se vendían comidas ligeras como bocaditos, rositas de maíz, helados, refrescos y cervezas.
Las comparsas más famosas eran El Alacrán, del barrio El Cerro; Los Marqueses de Atarés; Las Boyeras, de los Sitos; Los Dandys, de Belén; Las Jardineras, de Jesús María; Los Moros Azules, de Guanabacoa; y Los Guaracheros de Regla, entre otros. El carnaval devino la mayor fiesta popular de La Habana.
| La Reina del carnaval |
La Tradición de la Reina del Carnaval y el Rey Momo
Durante la República se elegía una Reina de Carnaval y un Rey Momo, que era un personaje gordo, glotón, mujeriego y sensual, que hacía todas las tropelias.
La Reina del Carnaval se seleccionaba fundamentalmente por su belleza, pero también por su cultura y sus modales. Estaba acompañada por seis Damas, elegidas por las mismas cualidades. Todas las Reinas y Damas debian de ser blancas, aunque de procedencia humilde.
La elegida recibía obsequios de las empresas industriales y comerciales. Orbay & Cerrato, la mayor fábrica de muebles de Cuba, regalaba lujosos juegos de muebles; la agencia Frigidaire, un refrigerador; y las agencias automovilisticas un automóvil.
La primera Reina del Carnaval habanero (1908), Ramona García, trabajadora de la fábrica de cigarros Susini, recibió más de 25.000 pesos en regalos, además una casa en la calle Concepción, en el barrio de La Víbora.
Después de 1959, se cambiaron las terminologías de Reina por Estrella y Dama por Lucero, por considerarse las anteriores expresiones de la pequeña burguesía. También pudieron participar mujeres mestizas. No sólo debian ser bonitas, tener cultura y poseer buenos modales, también ser una persona integrada a la Revolución.
En 1969 la fecha tradicional de los carnavales, en los meses de febrero a marzo, se trasladó para el mes de julio, para celebrar las fecha revolucionaria del asalto al cuartel Moncada en 1953.
A mediados de los años 70, en un programa de televisión, tuvo el último concurso para elegir la Estrella entre las jóvenes seleccionadas por empresas estatales. El veredicto del jurado, descontentó al público presente y desde entonces no se ha vuelto a elegir a la reina del carnaval de La Habana.
Por los perídos constantes de crisis en la Cuba actual, los Carnavales habaneros han perdido el glamour y la elegancia del cual se caracterizaban. Las empresas estatales carecen de recursos para el subsidio de estas fiestas, que se politizan aún más, perdiendo muchas de sus tradiciones originales.
| Comparsas habaneras |
| Cuba revive la Tarasca, quemar lo malo para que venga lo bueno |
Referencia
- Carnavales en Cuba. Costrumbres y Tradiciones
- El carnaval habanero antes y ahora, por Dimas, Septiembre 4, 2017
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